Llegó la noche conmigo. Comimos y escondiste tu abrigo. La carrera del escarabajo que siempre alienta el trabajo anestesia, no es suficiente. Y vendrá el sol, corres o vuelas?. Igual nos secamos con esa toalla roja, la de siempre tan mojada, siempre caliente. Y una pregunta olvidada, perdida con los restos de mozarella, entre mi copa y la canción, ya no se escucha nada. Si algún día sigo aquí, vuelve mañana.
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inquietante la entrada,quepasa tio?.la del facebook del elefante es chulisima!!!
ResponderEliminarEME